Imagine que usted heredó un armario muy antiguo (¡en nuestro caso,
de cinco mil años!). De tanto admirarlo, limpiarlo, revolver en él,
acabó por encontrar un compartimento que parecía esconder algo en
su interior. Después de mucho tiempo, trabajo y esfuerzo para no
dañar esa preciosidad, finalmente consigue abrirlo. Era una gaveta
olvidada y, por eso mismo, lacrada por el tiempo. Allí adentro usted
contempla extasiado un tesoro arqueológico: ¡herramientas,
pergaminos, sellos, esculturas! ¡Una inestimable contribución
cultural!
Las herramientas todavía funcionan, pues los utensilios antiguos eran
muy fuertes, construidos con arte y hechos para durar. Los pergaminos
son legibles y contienen enseñanzas importantes sobre el origen y la
utilización de las herramientas y de los sellos, así como sobre el
significado histórico de las esculturas. Todo está intacto, sí, pero
tremendamente desordenado, mezclado y con el polvo de los siglos.
Entonces, usted sólo limpia cuidadosamente y ordena la gaveta.
Pergaminos aquí, herramientas más allá, sellos a la izquierda,
esculturas a la derecha. Después, cierra de nuevo la gaveta, siempre
disponible y ordenada.
¿Qué fue lo que sacó de la gaveta? ¿Qué agregó? Nada. Sólo organizó,
sistematizó, codificó.
Pues fue sólo eso lo que hicimos. El armario es el Yôga antiguo, cuya
herencia nos fue dejada por los Maestros ancestrales. La gaveta es una
longitud de onda peculiar en el inconciente colectivo. Las
herramientas son las técnicas del Yôga. Los pergaminos son las enseñanzas de los Maestros del pasado, que nosotros jamás
tendríamos la petulancia de querer alterar. Esto fue la sistematización
del Swásthya Yôga.
Por haber sido honesta y cuidadosa en no modificar, no adaptar, ni
occidentalizar nada, nuestra codificación fue muy bien aceptada por la
mayoría de los estudiosos. Hoy, ese método codificado en Brasil
existe en todos los continentes. Si alguien no lo conoce por el nombre
de Swásthya Yôga, lo conocerá seguramente por el nombre de Yôga
Antiguo, o por la denominación erudita: Dakshinacharatántrika-
Niríshwarasámkhya Yôga.
Su nombre ya denota sus orígenes ancestrales, puesto que el Yôga
más antiguo (preclásico, pre-ario) era de fundamentación Tantra y
Sámkhya.
Texto extraído del libro Yôga Avanzado del educador DeRose.